Receta: arroz frito tres delicias.


INGREDIENTES

  • 200 g de arroz de grano largo tipo thai o basmati
  • 200 g. de gamba peladas o langostinos.
  • 2 ó 3 huevos para la tortilla francesa (depende del tamaño del huevo)
  • 3 lonchas de jamón York o cocido
  • 1 zanahoria grande
  • 100 g. de guisantes.
  • 50 g. de brotes de soja
  • Salsa de soja (acompañamiento)
  • Aceite de oliva virgen extra suave y sal (al gusto)

Aunque estamos acostumbrados a ver esta receta en los restaurantes chinos no es lo que se dice un plato propiamente chino. Esta forma de enriquecer un arroz blanco frito forma parte de esa extraña cultura chino-americana que se desarrolló en Estados Unidos a finales del siglo XIX y principios del XX.
El arroz frito en sí, es un componente muy popular de la cocina china que se suele servir como acompañamiento a otro plato o como en este caso, un plato en sí mismo. En Venezuela y Colombia se le conoce con el nombre de “arroz chino“, en Perú se le denomina “arroz chaufa” y en Ecuador se le llama “Chaulafan“.
No deja de ser un arroz que puedes preparar en un momento con ingredientes fáciles de encontrar. Puedes añadir casi cualquier cosa que tengas a mano o en la nevera, aunque el más conocido en España, el arroz tres delicias, sea con tres ingredientes principales: gambas, tortilla y jamón cocido. Los ingredientes empleados en la elaboración del arroz frito varían enormemente dependiendo de la zona del mundo en el que te encuentres. Suelen incluir zanahorias, brotes de soja, apio, guisantes, y otros cárnicos como pollo, cerdo, langostinos o jamón cocido dulce.
En los restaurantes del oeste de China han ido inventando sus propias variedades: con huevo frito, picante en el llamado “arroz Singapur” y “el arroz frito” que encontramos en España. En él también incluimos pedacitos de huevo para proporcionarle color y se suele acompañar con un cuenco de salsa de soja para añadirle un toque más salado. Os dejo con esta receta fácil, resultona y muy sabrosa, perfecta para cualquier día de este verano.

PREPARACIÓN DEL ARROZ FRITO

  1. Ponemos un cazo con agua a calentar, cuando hierva añadimos la zanahoria en trocitos no muy grandes y los guisantes frescos (si como yo usas guisante fino de lata, no sería necesario cocerlos). Añadimos una pizca de sal y dejamos cocer durante 10-12 minutos. Reservamos.
  2. Lavamos bien el arroz para limpiarlo de impurezas y exceso de almidón, así quedará más suelto después de cocerlo. Ponemos un litro de agua a hervir en una cazuela y cuando esté hirviendo añadimos el arroz y media cuchara pequeña de sal. Removemos de vez en cuando y probamos pasados unos 12 minutos para ver la consistencia del arroz. Cuando esté casi hecho (debe quedar un un poco duro) es el momento de apartar del fuego y escurrimos en un colador con agua fría, así dejamos que se enfríe para detener su cocción y que quede el grano bien terso.
  3. Mientras se enfría, en una sartén grande doramos el jamón que previamente hemos cortado en tiras no muy grandes. Debe hacerse a fuego fuerte para que se dore pronto, con un minuto es más que suficiente.
  4. Preparamos una tortilla con los huevos, calentamos la sartén en la que hemos salteado el jamón con 1 cucharada de aceite. Batimos los huevos con una pizca de sal. Cuando el aceite esté caliente vertemos el huevo batido, solo hay que cubrir el fondo de la sartén, debe de quedar bastante fina. Cuando esté lista la sacamos del fuego y cortamos en tiras muy finas. Reservamos.
  5. Cocemos ligeramente las gambas hasta que cambien de color en el agua en el que hemos cocido la zanahoria, las pelamos y salteamos en una sartén con poco aceite. Echamos en la misma sartén el arroz que tenemos reservado y removemos un minuto.
  6. Solo nos queda añadir el resto de ingredientes, podéis incluir brotes de soja, a mí gusta el toque crujiente que le da al arroz. Por último rectificamos de sal y servimos bien caliente acompañado de la salsa de soja.
Este plato se suele usar como guarnición de otros, por ejemplo, el cerdo agridulce, pato con bambú, pollo con setas, gambas al curry, etc. Si no os entusiasma el tema oriental, también es perfecto para tomar con unas alitas de pollo, un filete empanado o un pescado a la plancha. Imaginación al poder.