Por su gran tamaño parecía un corcho o una piedra. Pero resultó que, lo que Salvador y Ramón encontraron con un peso de más de seis kilos en el pueblo asturiano de Teverga, fue una gigantesca seta que ha dejado sin palabras a todos sus vecinos
«Yo pensaba que era corcho de la boya de un depósito que hubieran tirado», afirma uno de sus descubridores, aún asombrado por el hallazgo. Sin embargo, resultó que lo que se encontró fue un ejemplar gigantesco de Lycoperdon Perlatum, conocida coloquialmente como «pedo de lobo».
Este hallazgo, en cambio, fue encontrado de la forma totalmente casual, mientras los dos protagonistas segaban un campo cercano «Vi el bulto, fui ha agarrarlo pensando que era corcho, y al tirar me vino el olor a seta y nos quedamos absolutamente sorprendidos», explican.
Una buena tapa
A pesar de que sus descubridores pretenden guardar la seta para que todos disfruten de ella, parece que no todo el pueblo está de acuerdo, ya que a muchos se les hace la boca agua con esta «setísima», como la llaman Salvador y Ramón.
Y es que, al parecer, no todos tuvieron las mismas ideas cuando oyeron la noticia. «Lo primero que piensas es, ¡menuda tortilla que me voy a hacer!», afirma un ciudadano de Teverga.
Otros, sin embargo, preferirían cocinarla de una forma más elaborada, como una vecina del pueblo, que la pondría al fuego «con queso picante, como si fuera un filete al cabrales»
Sin duda, esta seta será codiciada por todos los bares de la región, ya que con ella podrían hacer una «buena y gran ración» acompañada de una bebida bien fresca para estos meses previos al verano.
Por www.abc.es
