Simon Rosenqvist, un joven de 22 años, recuperó la consciencia en mitad de una operación de pulmón pero no podía avisar a los cirujanos porque la sedación le impedía hablar o moverse. Su sufrimiento intenso duró 15 larguísimos y agónicos minutos, informa Telecinco.es
Rosenqvist fue sometido a una operación de pulmón el pasado mes de marzo, en un hospital sueco de Vaxjo.El joven podía sentir cada corte de bisturí del cirujano, y escuchar los comentarios del equipo médico sobre la evolución de su intervención.
"Mi cerebro me decía una y otra vez: 'dí tu nombre, haz algo, mueve los dedos de los pies'", contó el paciente al periódico ' TheNydailyNews'. "Pero yo era completamente incapaz de decir algo o de mover mi cuerpo", aseguró.
Rosenqvist sufrió dolores terribles hasta que se desmayó. Después de la operación, los médicos se quedaron sorprendidos cuando el joven les dijo que había estado despierto y hasta les dio detalles de lo que ocurrió durante la intervención y nombró quiénes habían estado presente en el salón.
Tres semanas después de la operación el jovendenunció la negligencia médica ante la Junta Nacional de Salud y Asistencia sueca. Y es que nadie le ha explicado cómo pudo sucederle algo tan terrible.
Por www.que.es
