¿Sabías que la obesidad mata más que el hambre?


Así de rotundo es un informe de la ONU que esta vez pone el acento en la obesidad asegurando que es más peligroso que el hambre.


El informe subraya que el fallo está en las políticas alimentarias y el dato es escalofriante: 1.300 millones de personas sufren este tipo de problemas en todo el mundo y son más de 3 millones las que mueren a causa de la obesidad o el sobrepeso.



Este año, el informe compara las consecuencias del hambre –el enfoque clásico- con las de la obesidad, y esta última sale perdiendo.



Los Gobiernos y las empresas alimentarias son las responsables de esta epidemia de sobrepeso y obesidad que asola los países desarrollados, según el autor.
Más obesidad = Más costes sanitarios


Traduciendo todo esto a cifras, el resultado es también muy desalentador. Un ejemplo lo tenemos en nuestro país, en el que el gasto del Ministerio de Sanidad en el tratamiento de problemas asociados a la obesidad es superior a los 2,5 millones de euros al año.


Y parece que los Gobiernos no trabajan para resolverlo. De hecho, este informe critica especialmente las políticas alimentarias que subvencionan la producción de alimentos poco saludables, como el maíz o la soja, degradando los ingresos de los agricultores.


Por otro lado, muchas empresas dedicadas a la alimentación han visto cómo aumentaban sus ingresos considerablemente dedicándose a la industria de la comida rápida, cargada de grasas y azúcares. Y dejando de lado otras opciones mucho más saludables.


El informe arroja otro dato económico que debemos retener en nuestras mentes: el incremento de un 10% de las enfermedades relacionadas con la obesidad y el sobrepeso reduce en un 0,5% el producto interior bruto (PIB) mundial, a causa del aumento de los gastos de los sistemas sanitarios de los diferentes países.


Con todo esto, el informe elaborado por la ONU quiere que las autoridades europeas tengan en cuenta todos estos datos de cara a la próxima política agraria común y se planteen una vuelta a la vida saludable. El autor quiere recalcar que no le parece muy lógico que se anuncie la comida basura y luego el Gobierno apruebe campañas en contra.


Fuente: atractivas.es