Agustina Guerrero acaba de publicar Diario de una volátil (Lumen), un cuaderno que recoge las viñetas que la autora ha ido recopilando en los últimos años, y que recogen su historia como creadora, como mujer y como ciudadana de este mundo loco que nos ha tocado vivir. Sus viñetas destilan ese carácter delirante que caracteriza al creador moderno: aquí hay miedos al futuro, presión por el trabajo, extrañas escenas de pareja y sobre todo mucha ironía.
Para Guerrero no hay temas tabú, y esa es una de las cosas que más se agradece de sus pequeñas historias. Porque la cotidianidad está hecha de peleas, de salidas de tono, de fluidos varios y de pequeñas disputas, pero con su trazo consigue convertir lo desagradable en un simple y desternillante retrato que nos ayudará a mantener el ánimo en nuestro día a día.
No se le caen los anillos si tiene que hablar de regla, si tiene que autoculparse por ser una paranoica, o si tiene que enseñar al mundo las escenas más íntimas de su hogar. Quizá así, reconociendo los errores, pueda conseguir que sus lectores se sinceren, se sientan identificados y resuelvan de una vez por todas los miedos que comparten.
Si alguna vez os habéis enfrentado a una mudanza. Si alguna vez habéis detestado compartir un bocadillo con vuestro amorcito porque lo queréis solo para vosotros. Si no os apetece depilaros a pesar de sus indirectas. Si la habéis cagado haciendo la compra. Si habéis tenido ataques de amor. Ataques de rabia. Ataques de risa o de sinceridad… este es vuestro libro.
Agustina Guerrero devela sin complejos las desgracias y maravillas del amor moderno. A continuación 10 ejemplos que os encantarán: